Queridos camaradas:

Les damos la bienvenida desde Atenas a la teleconferencia extraordinaria de los Partidos Comunistas y Obreros.

Es cierto que la pandemia ha impuesto algunas limitaciones en los encuentros en vivo de los partidos.

Sin embargo, no se pueden imponer limitaciones a la necesaria coordinación y lucha de los pueblos, de los partidos comunistas y obreros.

Este mensaje envía también nuestra teleconferencia extraordinaria de hoy, en la que expresamos una más rotunda condena del bloqueo de Cuba por el imperialismo estadounidense, expresamos nuestra plena solidaridad con el Partido Comunista de Cuba y su pueblo, que una vez más, en tiempos difíciles y condiciones complejas, defiende las conquistas de la Revolución Cubana.

Estamos convencidos de que los planes de desestabilización de Cuba trazados por el imperialismo no pasarán, que el pueblo cubano los volverá a derrocar.

Enviamos un mensaje de solidaridad internacionalista al pueblo palestino en lucha, que ha estado luchando durante décadas, a pesar de la correlación de fuerzas negativa, por el reconocimiento de su patria.

Condenamos la agresión israelí, el apoyo brindado por el imperialismo estadounidense y europeo a Israel para continuar la opresión de un pueblo entero.

Denunciamos la equiparación entre perpetrador y víctima, que es particularmente cultivada por la UE y exigimos al gobierno griego la implementación de la decisión del parlamento griego para el reconocimiento del estado palestino en las fronteras de 1967, con Jerusalén Este como su capital.

Por supuesto, estamos del lado de todos los pueblos que luchan, que  plantan cara a las políticas antipopulares, como son:

- los campesinos de India que han librado una lucha victoriosa y larga,

- las capas obreras y populares pobres de Turquía que protestan contra el rápido deterioro de su nivel de vida,

- el pueblo de Sudán que se enfrenta a los golpistas en las calles,

- los pueblos que en muchos países, a pesar de la pandemia, desarrollan luchas por la salud y la vida del pueblo, por sus derechos sociales y políticos.

Camaradas:

En Grecia el KKE está a la vanguardia de la lucha para proteger la salud de los trabajadores en las condiciones de la pandemia.

Apoya un marco de demandas integral, enfocando principalmente en el fortalecimiento del sistema de salud público.

Al mismo tiempo, nuestro Partido está del lado de los trabajadores, que con su lucha reclaman medidas para proteger su vida, convenios colectivos, aumentos salariales, que luchan contra las medidas antipopulares del gobierno.

Este esfuerzo ha dado lugar recientemente a luchas importantes y victoriosas, como la de los trabajadores en el monopolio COSCO, y en la empresa e-food.

El Llamamiento a marcha común combativa, que dirige el KKE al pueblo, es acogido por más y más trabajadores, científicos, jóvenes, que expresan su voluntad de confrontar las políticas antipopulares, la supresión de los derechos democráticos, las bases extranjeras y los planes de Estados Unidos y la OTAN.

Para allanar el camino para la formación de la Alianza Social de la clase obrera con las demás capas populares, que derrocará las medidas antipopulares y unirá a las grandes fuerzas populares en una línea de choque con los monopolios y el capitalismo.

Los comunistas de Grecia están trabajando en esta dirección.

Por esa necesidad, que deriva de nuestra época y los desarrollos en el sistema imperialista internacional.

Es la época que exige el derrocamiento definitivo de la barbarie capitalista y la construcción de una nueva sociedad socialista-comunista, libre de las deficiencias y los errores del pasado.

Esto no significa en absoluto que ignoramos las dificultades de la correlación de fuerzas negativa a nivel internacional, así como las importantes contradicciones interimperialistas que se manifiestan en nuestra región y en el resto del mundo.

¡Lo contrario!

Así, a diferencia de otras fuerzas políticas, creemos que Estados Unidos no "se van". ¡Están aquí!

De hecho, en Grecia están reforzando sus bases militares, que siguen creciendo y creciendo.

Forman nuevas alianzas imperialistas, como junto con Gran Bretaña y Australia (AUKUS), o el "Diálogo de Seguridad Cuadrilateral" (QUAD).

Se trata de "herramientas" nuevas y multifacéticas de los planes imperialistas que aparecen junto a otras más antiguas, como la OTAN.

Por supuesto, la orientación estadounidense, como lo demuestra la retirada de las fuerzas militares de Afganistán, así como las diversas guerras comerciales de los últimos años, es hacia la región del Indo-Pacífico.

La OTAN, a pesar de las "tensiones" internas de la burguesía de los estados que la integran, sigue elaborando nuevos planes de guerra contra otros pueblos.

Está tomando acción, en particular, contra la Rusia capitalista, desde el Báltico hasta el Mar Negro.

Está tomando medidas para intensificar la competencia con China.

La UE imperialista no puede de ninguna manera jugar un papel "progresista" en las contradicciones interimperialistas. Creemos firmemente que este es un gran engaño de quienes se orientan hacia tal punto de vista.

Los llamamientos, que se escuchan por diversas fuerzas de todo el espectro político burgués, de fuerzas liberales y socialdemócratas, pero también de cada tipo de oportunistas, de la necesidad de "autonomizar" a la UE de Estados Unidos y la OTAN, consideramos que funcionan como una cortina de humo ante los ojos de los pueblos.

La UE ha sido y seguirá siendo una unión cada vez más reaccionaria y antipopular.

La salida para los pueblos no es la llamada "democratización" y "humanización" de la UE y la OTAN, sino la lucha por la retirada de los países de estas alianzas imperialistas en combinación con la lucha por la toma del poder por la clase obrera y sus aliados en cada país.

Así lo demostró la experiencia de BREXIT. Si la retirada no va acompañada de cambios radicales en el nivel de economía y poder en cada país individual, en un grupo de países y en toda Europa, no puede funcionar a favor de los interés del pueblo.

Los temas del llamado crecimiento "verde" y la "transición digital" se incluyen cada vez más en la planificación de la burguesía en la fase actual.

Se trata de temas que por un lado son un ámbito para canalizar el capital sobreacumulado, para el fortalecimiento de la explotación de los trabajadores, y por otro lado son un campo de feroz competencia entre monopolios, (estadounidenses, chinos, alemanes, franceses, británicos, rusos, etc).

Vemos una creciente rivalidad entre Estados Unidos y China por la supremacía en el sistema imperialista, pero también otras contradicciones significativas con Rusia, o incluso dentro del eje imperialista euroatlántico.

Por supuesto, creemos que lo que tenemos frente a nosotros no se puede caracterizar como una "nueva Guerra Fría", copiando el anterior enfrentamiento de Estados Unidos con la URSS.

El análisis dialéctico de los desarrollos muestra que se trata de contradicciones, que se manifiestan en el terreno del modo de producción capitalista, que domina en las potencias poderosas que chocan por los beneficios de sus grupos monopolistas.

En estas condiciones, es importante tanto oponerse a la guerra imperialista como a elegir a un imperialista, oponerse a todas las alianzas imperialistas "viejas" o "nuevas", por la retirada de cada país de los planes y alianzas imperialistas, y al mismo tiempo fortalecer la lucha por el poder obrero, el socialismo.

En este sentido, el KKE votó en contra de los acuerdos agresivos de Grecia con Estados Unidos y Francia en el parlamento griego, que se presentan como "defensivos" para manipular y desorientar el pueblo.

Se pronunció en contra de los enormes gastos militares del país y señaló que estos se realizan en el contexto del esfuerzo de la burguesía griega por mejorar su posición en los planes y las organizaciones imperialistas.

Los comunistas iluminan sistemáticamente al pueblo y movilizan a miles de trabajadores y jóvenes en las manifestaciones.

El KKE está liderando el movimiento antiimperialista contra la guerra, en general en el movimiento obrero-popular, contra la creación de nuevas bases militares en Grecia, para el desmantelamiento de todas las bases e infraestructura de EE.UU y la OTAN, contra el transporte de armas nucleares al país.

El KKE exige el cese de la participación de las fuerzas armadas griegas en misiones imperialistas en el extranjero.

Que el pueblo no pague el armamento que sirve a los planes agresivos de la burguesía griega, las intervenciones euroatlánticas y las guerras, que Grecia no participe en ejercicios militares dirigidos contra otros estados.

El KKE busca fortalecer la solidaridad internacionalista con todos los pueblos que enfrentan la intervención imperialista y las guerras. Lucha por la retirada del país de las alianzas imperialistas de la OTAN y la UE.

¡Para que finalmente la clase obrera, el pueblo llegue al poder y construya la nueva sociedad, el socialismo!

10.12.2021