El KKE votó en contra de la resolución conjunta del Parlamento Europeo bajo el título “Sospechas de corrupción en relación con Qatar y necesidad de aumentar la transparencia y la rendición de cuentas en las instituciones europeas” que es un esfuerzo agónico de presentar el reprochable y repugnante escándalo de corrupción y soborno que se está desarrollando en la Unión Europea, con el Parlamento Europeo en su centro, como un “caso aislado” que concierne exclusivamente a unos eurodiputados y oficiales corruptos. La Unión Europea y sus instituciones buscan desvincular el soborno y la corrupción de eurodiputados antiguos y actuales, como la hasta recientemente vicepresidenta del Parlamento Europeo, E.Kailí, del escándalo de todos los escándalos. Esto es que la Unión Europea, todos sus instituciones, se crearon, existen y funcionan para servir los intereses del capital. Es precisamente este el carácter de la Unión Europea y de sus órganos, y entre ellos del tan destacado “único órgano elegido”, que  inevitablemente engendra la corrupción en su seno, la corrupción y los tratos “bajo la mesa” de su personal político con los grupos monopólicos -europeos y otros- y todos los que les representan, que a la luz del día defienden abiertamente los intereses y las ganancias capitalistas.

Cabe destacar la confesión cínica de la resolución de que la capacidad de los grupos de interés “de influir en la toma de decisiones del Parlamento mediante argumentos es una parte esencial de la democracia europea”.

Las medidas que propone la resolución acerca de la creación de diversas comisiones de transparencia, como de un “órgano independiente de la UE encargado de las cuestiones de ética” y de investigar todas las instituciones, órganos y agencias de la UE, están destinadas a correr la misma suerte que las anteriores. El “Registro de transparencia” de los grupos de interés que se promocionaba hace unos años como “un escudo contra la corrupción” resultó ser un registro de legalización y blanqueo de los llamados “grupos de presión” para moverse libremente y “con el sello” del reconocimiento de la Unión Europea por los pasillos y despachos de los eurodiputados, los Comisarios y otros funcionarios de la Unión Europea para promocionar su “mercancía”, organizar actos y recepciones, “think tanks”, etc donde se reúne todo el personal político de la Unión Europea. Porque todas estas “medidas contra la corrupción” ni quieren, ni pueden llegar a la matriz de la podredumbre y el pantano, es decir la construcción bárbara explotadora del capitalismo y el sistema político que trabaja para sacrificar la vida y los derechos del pueblo trabajador en el altar de la rentabilidad de los grupos empresariales.

Los trabajadores no tienen nada que esperar de la Unión Europea y las fuerzas políticas burguesas, gobernantes o de la oposición. Se confirma una vez más la posición del KKE de que: Sólo el pueblo salvará al pueblo cuando decida librarse de los grilletes del poder del capital y de sus asociaciones y de todos los que deciden por su vida, tomando en sus manos el mando de la economía y el poder.

La delegación del KKE en el Parlamento Europeo

15/12/2022